Es un nuevo y fascinante mundo para el niño.  Estará atareado explorando sus sentidos, por lo tanto dele mucho que oír, ver, oler, saborear y tocar. 0-3 meses En esta […]

Es un nuevo y fascinante mundo para el niño.  Estará atareado explorando sus sentidos, por lo tanto dele mucho que oír, ver, oler, saborear y tocar.

0-3 meses

En esta etapa:

  • El oído está completamente desarrollado.  Al niño le gusta la música si no está demasiado fuerte.  Le atraen sonidos y canciones.
  • Su mejor visión está a 12 pulgadas de su cara.
  • Por lo general, el lado derecho del bebé es más sensitivo ahora.  Y sus labios, pies y mejillas son las partes más receptivas al tacto.
  • Guinde juguetes que presenten grandes contrastes de color y patrones donde el niño los pueda ver y trate de golpearlos.
  • Ofrezca a su niño pruebitas de jugos dulces de frutas y otros líquidos que sean interesantes poniéndole una gota en la punta de la lengua.
  • Dele a probar al niño oler cosas como chocolate, canela, vainilla y nuez moscada.

3-6 meses

Su niño está empezando a entender que puede hacer que algo suceda.  Sus manitas siempre están inquietas explorando / manipulando.  Su cerebro en crecimiento ama la estimulación.  Aprenda a reconocer y tomar ventaja de los momentos en que es más apto para enseñarle algo durante su rutina diaria.

En esta etapa:

  • Se puede poner al niño en un estado activo al ponerle música clásica.
  • Cuando el niño está listo para aprender, sus ojos estarán bien abiertos y su mirada se puede fijar en el objeto intensamente.
  • Notará sus pequeñas manos y pies bien abiertos.  El pequeño tratará de agarrar el objeto y traerlo hacia su boca.
  • Su ritmo al respirar será pausado. Y podrá tratar de hablarle al objeto que desea.
  • Cuando empiece a llorar o a dormirse ya se ha terminado la hora de aprender.

Juguetes apropiados:

Móviles de cuna y similares – desarrollan la vista y el oído por medio de colores contrastados, texturas gráficas llamativas, luces de colores, formas en movimiento, sonidos y melodías.

Sonajeros y elementos sonoros fáciles de agarrar – incitan a querer cogerlos, y que faciliten la presión y las acciones de giro mano-muñeca.  Se consiguen con sonidos electrónicos en muchos de ellos.

Mordedores con combinación de texturas – desarrollan el sentido táctil mediante las manos y la boca. Alivian las molestias de la dentición.

En estas etapas las acciones son iniciadas por el adulto. Se le presentan los objetos y se guía en las acciones lúdicas a través de los gestos y las acciones cotidianas. Este contacto hace que descubra relaciones entre el sonido, el movimiento y las distintas percepciones táctiles que experimenta. Coordina así nuevos movimientos con sus ojos, su cabeza y sus manos.